sábado, 27 de diciembre de 2008

F u g a



Parpadean los peldaños
se sitúan entre la

a

y

la

z

y se camina
a su vera.


Se mastica una historia

y de pronto

es un instante
que se borra.


Se siente
que el tiempo transcurrido

es : n a d a

y que lo que se vivió
es algo parecido a un sueño.


Se pregunta
a qué sitio va la memoria

cuando la conciencia
se va de viaje.



En carne propia

El colectivo atraviesa uno de los puentes sobre el riachuelo.
Extrañamente he logrado sentarme,
me pongo a mirar perpendicular al viaje el agua lenta y viscosa.
Pasa y pasa como una cinta contínua la baranda,
el motor en la subida ruge.

La ciudad despereza su boca de chimenea para continuar con los trabajos,
la muchedumbre avanza en silencio con el brazo en alto intentando tocar el muro al frente.
Va torso contra espalda un paso y otro paso.
Algunos en el apretujo ya no tocan el piso
al tiempo se cansan muchos
son arrastrados,
los de atrás si ver impulsan a los de adelante,
van ciegos.
Sólo los primeros llegan a abrir los ojos cuando el final les toca a ellos en carne propia entre la opresión y el calor asfixiante.

No te esfuerces en gritar: estamos yendo al revés,
es para el otro lado.
Los de atrás empujan como cuando vos estabas en su lugar
no ven la pared hacia la que vamos con el brazo extendido
repitiendo nuestro propio nombre hasta gastarlo.
pidiendo hacia dentro:
Señor, incrementa nuestra renta.


El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre de 2008)

jueves, 25 de diciembre de 2008

el caracol de ash

me abro paso a dentelladas
y todos los dias
retrocedo algun metro.

aqui siempre hace frío.

es como si el tiempo
se hubiese quedado quieto
soportando las arrugas.

y yo mordiendo hueso
como una hiena exhausta.



dos metros menos.



25 de diciembre del 2008. john ash asesinando a frank capra.

Feliz navidad camión de la basura

Sur del Sur.
Habrá por ahí
un tipo vestido de Papá Noel
ganándose a sudor cada centavo
bajo el cielo del verano.
Ni una gota de viento,
la gente como si nada.
Algo de inteligencia que no cesa.
Virtudes de estar lejos del centro,
la gente sigue con la bondad promedio,
con los acostumbrados razonables gruñidos.

Saluda e ignora a los de siempre.
Tal vez sabe:
El salvador no vendrá de afuera.
Lo tenemos escondido en un armario
al fondo de todo allá adentro.

Veinticuatro, seis y algo de la tarde,
acabo de entrar del trabajo.
Mientras reflexiono sobre todo esto,
un estruendo viene de la calle
a avisarnos que la vida sigue.
Me apresuro a sacar la bolsa,
allí viene,
por la fiesta,
hoy un poco más temprano.
Como un arbolito con ruedas de la vieja tienda Harrod´s,
Echando un humo más negro que mis pecados
con sus luces naranja
y sus ruidos infernales.

Sobre milagros no opino,
te acariciaría a vos apenas
que sos parte de mi mundo.
A vos mesías sin promesas,
que no cambias nunca.
Te daría en la carrocería un beso,
si no fuera por el olor nauseabundo
y la nube de moscas que te persigue.

Abro la puerta de calle y ya se están yendo.
Pego un chiflido,
revoleo el brazo y le acierto justo al hueco
como si hubiera estado practicando todo el año.
Los muchachos colgados del pasamano festejan
gritan “Ehhh” con la mano enguantada en alto
y se van doblando la esquina.

No tengo dudas,
somos nosotros sobre esta tierra,
no vendrá de afuera.
Seremos nosotros o nadie.

Feliz Navidad,
camión de la basura.

El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, enero 2008)

domingo, 21 de diciembre de 2008

Algo por nada

Lentamente nos rodea un supuesto enemigo que se va mimetizando a nosotros
el vagón bambolea maniquíes en el subterráneo
cada cual atiende su juego
su celular
su música no hecha por él,
su pantallita,
su que se yo.

Despreocupación
cada vez le cuesta más disimularse
desde nuestra miseria emocional y vana
Está también en tu cabeza,
piensa,
piensa
no desprecies.
Yo sé que duele,
no hay mala intención
sólo llamar tu atención mientras hablo.

Recuperar la calma como sea,
ayudará a que los menos salgan lastimados

Nos han llamado,
convocado en vano,
no podíamos ir,
estábamos retenidos,
incomunicados,
abandonados
medicados
presos
pasamos los días las noches
nadie vino por nosotros,
ensayamos respuestas entre las cuatro paredes que luego dejamos de preguntarnos,
convenciones básicas que pasamos por alto
saltando barricadas.
Ahora llegamos en bandada aunque nada nos une,
no esperes algo a cambio de nada
ahora somos gente que no ha aprendido a relacionarse
una nube de langosta trepando la colina que ves
y te da miedo

Recuperar la calma como sea,
verse en los ojos el temor mutuo,
escuchar antes de gritarse
ayudará a que los menos salgan lastimados.


El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre 2008)

jueves, 18 de diciembre de 2008

Operadora: Comuníqueme con los que aún sueñan

Territorio que se desgrana cuando vuelves paso a paso
terrible duna vuela grano a grano,
se disemina hacia otras tristezas
a depositarse sobre otras esperas.

A vos te debo un canto,
si,
un: te quiero tanto
un grito beduino que le presto al Simún.
A vos también que has tomado mi turno en la rueda del tedio.

Dejo entreabierta la ventana
escucha la voz sincera,
no definitoria
no sobradora,
ya lo dice el refrán:
son dos cortas y una larga

Espero tal vez logre aunque sea una estrofa
refugiarse de este Sol en un pozo,
se quede allí vibrando cual garganta
y alguien beba mañana de este cariño que siento
reciba algo de este oasis
sepa que para los jorobados por la vida
existen más que espejismos

El Poeta del Asfalto (noviembre de 2008)

lunes, 15 de diciembre de 2008

Entre nos

la ciencia alborotada
corriendo atrás de cada primer hallazgo
para publicarlo, venderlo
y luego desmentirlo.
A veces pienso contrario a mis ideas,
cerrar un tanto el círculo
a tanta contradicciones y confusiones
ser la gramilla que crece trabajosa bajo el bosque.
Lograr disipar entre todo las motivaciones que podrían unirnos a vos a él, a mi.
Comenzar a hablar,
Pero hablar en serio de las cosas que nos interesan
utilizando el peso de nuestra inocencia contra la pared de lo conveniente,
la zanja de lo correcto
tal vez saltarla.
Muchos van por ese cauce
a un mañana parecido al ayer,
demasiado parecido para mí,
pese a tantos adelantos.


El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre de 2008)

domingo, 14 de diciembre de 2008

mientras te escribo el poema más bello del mundo

mientras abro otra lata de cerveza
prometo escribirte el poema más bello del mundo.
uno de esos en los que la palabra parasiempre
se repitiera tanto y tanto
y tanto
que el texto sudaría sangre al final
de cada verso.

el corazón zurcido con anzuelos
en una estrofa de tres versos,
como un lazo rojo atrapando una caja vacia.

escribiría atándo las palabras
para que no se escapasen,
hilaría con alambre de acero,
envuelto en llamas como un neón
y lo lanzaría a tus pies.

amor, dulce amor.

creo que necesito otra cerveza.





john ash, 14 de diciembre 2008, capital del sur.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Calentar en la pava el agua,
crema
brocha de pura cerda.
El espejo espera que vayas a reflejarte en él de tanto en tanto,
cantás Meditation por fonética, sin entender mucho a la par del disco,
como un Sinatra de Barracas,
como un noyorkino que escuchó demasiado a Gardel.

Te concentrás en la entonación y las pausas,
el afeitarte es ya algo casi automático,
el tiempo te da la práctica de saber justo donde termina tu cara,
el no ver las manchas de humedad diseminadas a discreción por el lado de atrás del espejo mientras te miras.

Entre pasada y pasada,
haces una mueca de cantante,
alguna payasada,
tu voz se cuela por la respiración del baño,
brotará en los de los vecinos esta mañana de domingo
para acompañarlos
para perturbar su calma
para saber que alguien no tan lejos
esta triste,
pero canta.


El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre 2008)

Meditation: Autor Antonio Carlos Tom Jobim (q.e.p.d.)

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Agujeros en tu pasado,
fríos, sin paradero,
a mi también me duelen.
Cuenco donde la tristeza se junta
capítulos que faltan
ejemplares con el lomo arrancado,
te costaría mucho sacarlos para ver dentro de que se tratan
lo harás cuando se den las instancias o tal vez nunca.

De nada sirve enfocar el pasado mientras el presente decae
no tenemos nueve vidas.
El odio esta cargado sobre la mesa,
cargado y recargado
Vos podés intentar ayudar y así ayudarte,
si te quedás vacío,
entonces por más que quieras
ya no podrás dar nada.

Tratemos de cantar alguna canción que todos sepamos
sin tapar a los otros,
aprendamos
escuchemos
Tal vez lo logremos o al menos apaguemos nuestra reiterada queja
al escuchar que somos parte de lo que va desafinando.

El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre 2008)
A veinticinco años del fin formal de la última dictadura en el territorio de argentina, dedicado a las miles de muertes vilentas nunca esclarecidas durante este periódo democrático sobre las cuales casi nadie habla. Y por la recuperación de la autocrítica.


Cuando las aguas bajaron más calmas,
vinieron a decirte sobre tu identidad verdadera.
Partían de la base equivocada de que para el resto lo más importante era hablar con ellos.
Hacían preguntas demasiadas,
decían querer ayudarte, pero eran tan parecidos a la mayoría de los que hasta entonces viste
incapaces de renunciar siquiera a algo suyo para alegrar a otro
que decidiste que no te interesaba siquiera oírles.
Parecían depositarios de un raro deber,
sentían un extraño derecho a perturbarte.
Por un momento pensaste si de tanto afirmar sus derechos,
no eran parte importante de los que nos obligan a ser dependientes de la ley.
Te sentiste menospreciado en tu simpleza,
en realidad nunca supiste que signifca la palabra : "identidad"
les pediste qe te dejaran en paz,
fueron insistentes, dijeron: no puede ser...
Te quedaste mirándoles con pena desde detrás de tus ojos,
parecía que no supieran que había alguien allí parecido pero distinto a ellos.
Se alejaron maldiciendo con su procesión de antorchas,
con su rencor cada vez más similar a lo que odian.

Quedó alguien aquí
que prefiere y elige seguir siendo nadie entre la selva de luces.


Para todos los rehenes de Los dueños de los muñecos

martes, 9 de diciembre de 2008

Escoger tener lugar

Ya te acostumbraste a la suciedad de la caverna
eso estás pensando,
pero es un sólo paso
tal vez dos o tres bastarían,
no te acostumbres a la corrupción,
no todo da la mismo.
Si te rendís,
quien va ir a buscar lo que falta
te llaman siempre desde aquel rincón,
no te quedes allí en penumbras observando a los demás
hay mucha gente afuera,
mucha tratando de salir
vos no pertenecés a esa sombra
No sigas jugando al héroe
soñando con cuervos blancos
Si no estás fuera,
no podrás sacar a nadie
Es tal vez un sólo par de pasos,
tal vez dos,
silenciosos
calmos,
no de los que se cargan de promesas y te pisarían la cabeza si lo pudieran hacer.
Un asomar un pie fuera de la boca de la cueva
bastaría para que la luz vuelva.

El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, noviembre 2008)

lunes, 8 de diciembre de 2008

no te olvides de no pararte a esperar frente a ciertas puertas donde no cabes
del mundo y su promesa de sótano con ventiladores
de repartirte siempre que puedas para dejar de ganar, tal vez,
pero no perder del todo...
de volver bajo aquel alero cada vez que llueva
para sentir el alegre sonido de los cristales finos
¡de que la bolsa está vacía!
no te olvides
de no despellejar camellos porque sí contra el ojo de una aguja
de no hurgar de más en el tinto muy profundo
del callejón que no va
de mirar y también ver los signos en las paredes
de los que quisieron tal vez matarte,
que no los odias
te tocó,
como si caminaras por un campo y de pronto cayera sobre vos
una flamenca desmayada desde lo alto

No te olvides de los faroles que ciegan caras
de los pies demasiado juntos,
de la inmovilidad de tu brazo izquierdo
del torso hacia delante, anticipo de caída,
de no caminar sobre promesas rotas
¡porque estás descalzo!
de las palabras no dichas hace tanto en la boca
de contestar, por ejemplo: ¡Qué buena que estás!, o Me cago en lo correcto
entre las setecientas palabras rígidas que pronuncias esquematizado
por vos,
no por otra cosa,
por los otros, si,
pero a través de vos
no te olvides
de seguirle dando,
de no quedarte vacío


El Poeta del Asfalto, donde siempre diciembre de 2008
¿probaste con un yogurt?
La versión original que era para recordarme cosas a mí, como casi todo lo que escribo,
y terminaba con la palabra: Pelotudo.

sábado, 6 de diciembre de 2008

En la rutina todo parece diluirse.
Tuviste fe, y las montañas siguen ahí,
el tren va.
En el vagón ¿tal vez cuantos como vos?

¿Cien?,
¿Ciento cincuenta?
No lo sé.

Si te pasara algo ahora,
si le pasara algo a un desconocido,
¿cuántas?, ¿cuántos?

¿Cinco?
¿seis?
¿Cincuenta y ocho?, ¿todos?.
¿nadie?

El hombre y la mujer que inventas están parados allí,
no muy lejos.
Cuando te bajes dejá tantos años de proyectos,
comenzá realmente a pelear contra la injusticia desde adentro tuyo
y sabrás que peleás por esa gente.

El Poeta del Asfalto, Buenos Aires noviembre de 2008.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Acá y en la China.

Inicio,
programas,
bloc de notas
doble click
Podrán vencer,
pero no convencer.

No recuerdo quien lo dijo.

El presente empieza a volar,
mientras trato de adaptarme a los tiempos que corren.
Sigo creyendo que cuando a la gente se le habla con la verdad,
y se le da realmente a elegir,
la respuesta es buena.
Los sustos se asimilan,
las broncas pasan.
Lo que queda es lo imporante,
menester abandonar la inmediata histeria
de la información por la información al instante.
Recuperar la capacidad de análisis.
¿qué nos dicen?
por qué y para qué nos hablan,
si es que realmente la cosa está tan aceitada,
que ya ni hacemos falta,
que los pibes ahora nacen por email,
que con un treinta por ciento de la población se arreglan,
y el resto
que reviente.
Entonces cerremos la puerta,
y que otro gil les atienda el boliche.


El Poeta del Asfalto (harto de computadoras), Buenos Aires octubre de 2008

miércoles, 3 de diciembre de 2008

espejismo

espejismo





se detuvo a mi lado un hombre,
viajámos juntos hasta el final de la línea.
yo le miraba de reojo,
y el miraba fijamente por la ventanilla
el negro hecho de velocidad del tunel.

parecía cansado,
sin nada que hacer,
en realidad sin nada de lo que
estar cansado,
o sin nada de lo que no estarlo.

el tipo se giró
y me miró fijamente,
sin esconderse,
como si observara un espejo
con la certeza de que no encontraría nada
que no supiera.

llegamos al final de la linea,
él desapareció por el pasillo.

creo que le conocía.

no estoy seguro.





john ash, capital del sur 3 de diciembre.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Tienes una garra donde debía nacerte una mano.

El desafío no es vencerlos,
no rebajarse a su lodo.
Demostrar que existe otro camino
fuera de los prefijados.

Ellos han descubierto la rueda
para avanzar e imponerse
acarreado sus pestes,
su irracionalidad,
sus punitorios,
sus cláusulas de letra chica
Han hecho callar a los niños,
han dejado de escuchar a los ancianos,
Han impuesto el odio,
si,
por sobre todo odiar
sin fundamento alguno.
Han logrado que los jóvenes piensen en la muerte,
que hablen de la muerte.
Se han sentido con derecho a ocupar el lugar de otros
sin remordimiento;
sin intentar atenuar los costos.
Han saqueado, desembarcado,
echado su basura en el patio ajeno.
Avanzado,
invadido todo y a cualquier precio.

Han logrado que pensemos que es así,
debe ser así
y lo seguirá siendo sin remedio,
por los siglos de los siglos,
amén.

El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, septiembre de 2008)