Por suerte,
todavía tengo amigos
que no saben cuanto vale un dólar.
Que no tienen un plástico con que invitarte un vino.
Que están totalmente desinformados,
salvajes,
contradictorios y perdidos,
gastando de a uno sus minutos de vida.
Que no saben manejar un control remoto
que creen que DiViDi,
es multiplicá, pero al revés.
Que hacen falta,
y no tienen un jodido teléfono en donde se pueda ubicarlos
pa´ avisarles que me han dicho
que hoy es el día del amigo.
No sé si con mucho sentido lo será,
o tan sólo para vendernos más y más vacío,
Pero por las dudas, los saludo.
Y a ese hueco lo lleno de un abrazo
con estos brazos largos y sinceros
que se confundirán con los de ellos
en la similitud del no haber sostenido triunfos
y en la de aún
no darse por vencidos.
El Poeta del Asfalto (Buenos Aires, julio de 2008)
sábado, 19 de julio de 2008
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1 comentario:
Muy bueno.
GC.
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